
La Federación de Servicios a la Ciudadanía de Comisiones Obreras Canarias (FSC-CCOO) ha alertado este miércoles de las «graves consecuencias sanitarias» que está generando la actual política de recortes aplicada tras la integración del Instituto Canario de Hemodonación y Hemoterapia (ICHH) en el Servicio Canario de la Salud (SCS), decretada en diciembre de 2024. Exponen que la falta de una estrategia «eficaz» de reorganización está provocando «una caída drástica» en la recogida de donaciones de sangre.
Además, la organización ha denunciado en un comunicado la situación de «represión sindical» que sufren los trabajadores tras la fusión. De este modo, advierten, la extinción de los comités de empresa del ICHH en ambas provincias, en junio de 2025, supone un hecho «sin precedentes» en la administración pública canaria y deja al personal «sin representación legal».
Desde FSC-CCOO advierten que esta decisión vulnera derechos fundamentales, al eliminar órganos de representación que, por su carácter electo y democrático, «no pueden ser cesados unilateralmente».Por ello, el sindicato ha anunciado la interposición de acciones legales tanto por esta actuación como por la gestión «opaca» de las listas de contratación.
«Se ha consumado una represión sindical intolerable, que ataca directamente a la libertad sindical y a los derechos laborales más básicos», ha señalado el colectivo sindical.
CAÍDA «DRÁSTICA» EN DONACIONES
La Federación también ha alertado de las «graves consecuencias» sanitarias que está generando la actual política de recortes aplicada tras la fusión. Aducen que la falta de una estrategia eficaz de reorganización está provocando «una caída drástica» en la recogida de donaciones de sangre.
Actualmente, exponen, cinco de los ocho grupos sanguíneos presentan niveles de stock en alerta (nivel 2), con un margen operativo de «apenas dos días», lo que pondría en peligro el suministro de más de 3.000 productos hemoterapéuticos esenciales para transfusiones hospitalarias en toda la comunidad autónoma.
A ello suman el recorte del 30 % en la plantilla y el encarecimiento del servicio, ya que, aseguran, el SCS ha externalizado la adquisición de hemoderivados en lugar de reforzar la red pública de donación.
El sindicato ha denunciado que, con todo ello, se está priorizando el ajuste económico a costa de la salud pública, en una «deriva austericida» que, además de «perjudicar» a los pacientes, encarece el coste de la sanidad. Así, han reclamado al Gobierno canario el restablecimiento inmediato de los comités de empresa del extinto ICHH, el cumplimiento íntegro del acuerdo de integración y el fin de los recortes.
Además, han exigido la elaboración urgente de un plan de contingencia para garantizar la autosuficiencia en la donación de sangre en el archipiélago.